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Es candil de la casa

Imprime elegancia y distinción a los espacios de tu vivienda con luminarias colgantes.

NEGOCIOS / STAFF
Da el toque final a una habitación con la luminaria correcta.

La iluminación puede avivar o entristecer un área, coinciden los expertos, pero no precisamente por la intensidad.

Aunque se podría pensar que los candiles manejan una línea muy clásica, actualmente las posibilidades de diseño aumentaron debido a nuevas fuentes de luz.

"Gracias a la incorporación de las tecnologías LED y OLED, las luminarias han tenido una evolución sin precedentes en los últimos años", comenta Mauricio Jiménez, de Birot Monterrey.

La iluminación OLED, la versión orgánica de los LED, alumbra de una forma muy similar a la luz natural, pero permite que su diseño sea flexible y liviano.

El aspecto físico y el funcional son dos factores que afectarán la elección de iluminación, menciona Jiménez.

"Es importante considerar el tipo de luz que emite cada candil para que resulte acorde a las necesidades del espacio", agrega.

Las ventanas, la altura y las dimensiones de la habitación repercutirán en qué tanta intensidad de luz se necesita.

Cuando ya se tiene una idea de qué tipo de iluminación se requiere, se puede comenzar a elegir un diseño.

Ya sea rústica, clásica o contemporánea, el diseño de la casa determinará el tipo de luminaria suspendida, asegura Belia Muñoz, de Softline Decor.

"Es importante tener ya la decoración del cuarto para poder ubicarlo (al candil) inteligentemente", coincide Mónica de León, de Evoluzion.

Uno de sus principales objetivos es decorar, por lo tanto es recomendable instalarlo en áreas sociales, como la sala, el comedor y la recámara principal.

"En las otras habitaciones se pone algo más sencillo o abanicos de techo", detalla.
Aunque es un accesorio atractivo, no todas las habitaciones son aptas para este tipo de iluminación.

La cocina no es idónea para instalar uno, señala Francisco Carrera, de Roccó, despacho de arquitectura e interiorismo.

"No es recomendable por la limpieza, el mantenimiento que se le tiene que dar, en este caso es por la estufa", advierte.

Para un espacio abierto, por ejemplo, primero hay que determinar si requiere o no de un candil y cuántos podrían instalarse.

"Si las áreas están conectadas visualmente, lo ideal es que sean dos", menciona.
El precio de un candil varía según el tamaño y los materiales.

Uno sencillo ronda entre 10 mil y 30 mil pesos, pero uno más grande y voluminoso cuesta entre 50 mil y 80 mil pesos.

La altura, el peso y la estructura son algunos aspectos que se consideran para definir el precio de la instalación, que inicia en 750 pesos.

Considera, además, un seguro de alrededor del 10 por ciento del costo del luminario que te protegerá en caso de que tu candil se rompa o caiga.


Desde el techo
Tres aspectos definen si una habitación es apta para un candil:
MATERIAL
Verifica de qué está hecha la losa para ver si soportará el peso de la luminaria suspendida
ALTURA
Es importante que el espacio tenga una altura doble para que luzca el candil.
SALIDAS ELÉCTRICAS
Revisa que las fuentes de energía sean las adecuadas y que estén en el lugar correcto.

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